ALFREDO FLORES SUAREZ ARANA
(1897-1987)
Nació en Santa Cruz de la Sierra el 6 de marzo de 1897. Hijo de los esposos Adolfo Flores y Luisa Suárez Arana de Flores. Desde su infancia vivió en Buenos Aires, Argentina, donde estudió primaria en el colegio Salvador y secundaria en el Colegio Nacional. Ingresó a la Academia de Bellas Artes y posteriormente se recibió en la Escuela Diplomática de Buenos Aires.
A los 18 años regresó a Bolivia para cumplir con el servicio militar. Desde 1920 inició intensa actividad intelectual y diplomática. Luego de trabajar en Santa Cruz, en el diario La Ley, viajó a La Paz donde por su excelente formación, ingresó a la Cancillería, dando comienzo a su brillante carrera diplomática. En poco tiempo fue ascendido a diferentes carteras ocupando funciones importantes en el escalafón de la diplomacia nacional.
En 1922 publicó “Del arte español” y “ Quietud de pueblo”, en editorial Renacimiento de La Paz.
Durante ese periodo participó activamente en la vida política del país llegando a ser elegido diputado por Chiquitos en 4 legislaturas diferentes.
En 1930 se estrenó, en uno de los principales teatros de la capital argentina, su obra “Luces de Buenos Aires”. Esta comedia, escrita en colaboración con su hermano Mario Flores, alcanzó rotundo éxito ante el público argentino.
En 1930 publicó además, “Las aduanas libres de Oriente” y en 1933, “Desierto verde”. Ese año participó en la Guerra del Chaco como jefe de columna de un convoy del Ejército Nacional. Su heróica acción el 27 de noviembre, por la que salvó 10 camiones bolivianos de manos paraguayas, le valió carta de reconocimiento y ascenso militar.
En 1937 publicó “Síntesis del momento boliviano”, conferencia leída en el Ateneo Iberoamericano de Buenos Aires. Entre 1939-1941, el gobierno nacional le asignó nuevas responsabilidades enviándolo, como Encargado de Negocios, Ministro Plenipotenciario, Inspector de Consulados y Delegado de Asuntos Internacionales, a Alemania y Ginebra. Mientras vivía en Alemania y en plena agitación de la II Guerra Mundial, Flores escribió su novela “La virgen de las siete calles”, que fue publicada en 1941 por la librería Editorial “El Ateneo”, de Buenos Aires.
Alfredo Flores desempeñó consecutivamente el cargo de Ministro Plenipotenciario en diversos países, como México, Italia, Suiza. Representó a Bolivia en diferentes organismos internacionales. Asistió como Delegado Nacional a muchos congresos en el exterior. En su infatigable labor diplomática firmó convenios, tratados y notas reversales principales con Argentina y Brasil.
Escribió valiosos documentos sobre la Guerra del Pacífico, desviación del río Lauca, límites del Lago Titikaka, agroindustria del Oriente boliviano. Toda su producción intelectual fue publicada en revistas y periódicos nacionales y extranjeros. Por esta labor era conocido como el “Internacionalista Alfredo Flores”.
Aunque la mayor parte de su tiempo estuvo dedicado a su carrera diplomática no dejó nunca de cultivar todas sus cualidades artísticas. Fue periodista, ensayista, novelista y dramaturgo. Tuvo enorme pasión por la música y la pintura que cultivó con exquisita sensibilidad.
Alfredo Flores casado con la señora Cristina Paz Campero formó un hogar de extraordinaria fortaleza espiritual donde se educación sus hijos Mabel y Alvaro.
Este ilustre escritor y diplomático cruceño, que fue miembro de la Real Academia de la Lengua y recibió el Cóndor de los Andes, falleció en su ciudad natal el 2 de febrero de 1987.
“Volver a un pueblo, después de muchos años es como leer nuevamente, en la edad madura, la novela que nos deleitara en la infancia».
Alfredo Flores